19 de diciembre de 2011

Dumb Reviews: Misión Imposible, Protocolo Fantasma

Si "Misión Imposible, Protocolo Fantasma" (MI4 desde ahora, para ahorrarnos protocolos) la hubiera dirigido el Dominic Sena o Simon West de turno, le estarían dando palos hasta en el carnet de identidad. Pero la ha dirigido Brad Bird, director de apellido pajaril y reputada trayectoria con gemas en su currículo como "El gigante de hierro" o "Ratatouille"; y ese bagaje, esa respetabilidad, ese buen rollito "vengo de Pixar, de los dibus adorables", está produciendo un fenómeno curioso: que MI4 esté siendo alabada hasta la genuflexión. La película tiene actualmente un 94% de críticas positivas en Rotten Tomatoes, un dato impresionante para una película de acción, para una película de Tom Cruise, para una cuarta parte de una franquicia y, en general, para cualquier producto que presente imágenes en movimiento.

Con la contratación de Brad Bird, Tom Cruise no fichó un director, fichó un relaciones públicas para la película. Viejo zorro. ¡Cómo sabe este tío!


Los críticos aplauden las poderosas set-pieces de MI4 -la del rascacielos Burj Khalifa de Dubai es sencillamente impresionante- y la inyección de humor auto-paródico que ha aplicado Bird al conjunto (muy disfrutable, para qué negarlo), pero olvidan con alegría senil ese final anti-climático, ese argumento hueco o esos personajes de cartón-piedra, especialmente el de Ethan Hunt. Que sí, que Hunt siempre ha sido el héroe que corre y salta, pero en la tercera parte de la saga recibió un corazón cortesía de JJ Abrams. Una mujer, una vida, una patata. Hunt ya no jugaba en un equipo de uno, en MI3 se estaba jugando las lentejas. Sí, claro, seguía siendo bigger than life, derribando helicópteros con el dedo gordo del pie y todo eso, pero ahora también tenía una (pequeña) dimensión humana a la que podíamos agarrarnos cuando estuviera a punto de caerse por el acantilado. Viendo MI4 ya le podía haber caído un piano en la cabeza, que mi conexión con el personaje era la misma que tengo con mi panadero (... mierda, esto va a ser doloroso para mi panadero).


Corazón arrancado de cuajo al protagonista, que vuelve al modo Bond (etapa Brosnan, no Craig) de entregas anteriores de la franquicia. Vale, acepto. Es una cuarta parte de una saga que adapta una serie de televisión de 1966. Cualquier intento de crear algo original a estas alturas merecerá mi aplauso.

La pena es que, más allá de los chistes, intentos hay pocos.

Durante las más de dos horas que dura la película, estuve buscando como loco esa "gran idea" de la que hablaban Tom Cruise y JJ Abrams (ahora productor de la cinta, guionizada por Josh Appelbaum y André Nemec -dos veteranos de la casa Bad Robot, que pergeñan un libreto soso y extrañamente intrincado-). Cuando MI4 se puso en marcha, quizá como última bala de Cruise para que el fulgor de su estrella no se apagara del todo (el actor venía de trompazos -relativos- como "Leones por corderos", "Valkiria" y "Noche y día"), tanto Abrams como The Cruiser aseguraban tener una "gran idea" para una nueva entrega. Que MI4 no nacía de la necesidad del actor de recuperar el mojo perdido, qué va, nacía de la necesidad, pura y honesta, de compartir con el mundo esa gran idea que no podía quedarse guardada en un cajón.

Bien, ya he visto los 133 minutos de MI4, ¿cuál era esa "gran idea" exactamente? ¿Darle más líneas al personaje de Simon Pegg? ¿Desperdiciar a Tom Wilkinson y Ving Rhames en escenas de dos nanosegundos? ¿Convertir al malo de la función en un botarate fofo y cartoon, que supera en bufonía al Jonathan Pryce de "El mañana nunca muere"?  No sé... ¿copiarle descaradamente el look al Superman de Shane Davis para el póster? Paradme cuando acierte.


La gran idea de la película, en esto convendremos todos los hombres con ojos, es Paula Patton. Si tienes la capacidad de levantar los párpados no necesito apoyar esta frase con argumentos. No obstante, te regalaré una prueba gráfica.


Sin originalidad ni corazón, ¿qué nos queda? Mucha tralla, claro. Las secuencias de acción de MI4 son un trueno. Además, disfruté de ellas en el mejor cine de Madrid para ver este tipo de películas: los Cinesa IMAX de Parquesur. Llegué a sentir vértigo en algunas. También tenemos unos resultones títulos de crédito, de nuevo conectando con el universo Bond, con imágenes barrocas y algunos de los momentos por venir en el film. Y, para rematar, el ya cacareado chute de humor para una saga que, ciertamente, siempre se ha tomado muy en serio a sí misma. Y eso no tiene por qué ser malo.

No quiero dejar de mencionar algo especialmente irritante de esta película, que me produjo picores de escroto: parece no saber cuándo cortar el rollo. Secuencias ya resueltas, donde está todo el pescado vendido, se alargan innecesariamente. Hablo de conversaciones entre personajes, explosiones, finales, principios, flashbacks... les sobra por delante, por detrás y de canto. Por curiosidad, he buscado el nombre del montador de MI4: Paul Hirsch. Independientemente de que Brad Bird y Tom Cruise le ataran de pies y manos, le amordazaran y le abandonaran en un cuarto oscuro tras jugar al medievo con su culo, es interesante mencionar algunas películas montadas por el señor Hirsch: "Dylan Dog", "Código fuente", "Asesinato justo", "Un vecino con pocas luces" y "Date Movie", entre otras lindezas. Ahí lo dejo.


¿Es Brad Bird un buen director de acción? Sí, es un excelente director de acción. Dadle a este tipo presupuesto para lo que pida, que no le falte de nada, que con toda seguridad entregará a cambio una pieza de ejecución impecable. Profesional, impoluta, reluciente. Ahora bien, el alma, el duende... ¿dónde está todo eso, Brad? JJ demostró garra, chispazos de genio, arrestos, en MI3. No puedo decir lo mismo de ti.

Supongo que al final todo se reduce a una cuestión de sabores. Yo prefiero un puntito de épica, de drama y tensión, en mi misión imposible. Otros -desde luego todo internet- prefieren la jarana. Pues nada, a gozar.

Adjunto el magnífico primer trailer de MI4, con el "Won´t Back Down" de Eminem y P!nk.

5 comentarios:

Jimmy Dix dijo...

Va a ser que hemos debido de ver dos películas diferentes, Clark. O eso, o quizás yo sea de los que prefiere la jarana.

¿Conoces el chiste de las setas y los rolex? Pues eso. Si quiero épica, drama y tensión, yo no me meto en una sala a ver la cuarta parte de una franquicia que siempre ha dado lo que prometía: jarana. Yo sabía a lo que iba, y me lo he pasado, nunca mejor dicho, de cine. ¿Ese puntito de humor? Me ha encantado.

En lo único en que coincidimos es en alabar los atributos físicos que Dios le ha dado a esa mujer —táchese mujer y póngase hembra, ay, omá— llamada Paula Patton. Decir que está tremenda es quedarse corto.

Clark Kent dijo...

A mí me ha encantado la jarana y el humor, que conste. Sólo digo que en la tres me daban eso y algo más. Aquí me han dado menos.

Lo que digo es que, cuando empiezo a ver misiles volando por el espacio y villanos de este tipo, yo empiezo a mirar el reloj.

Pero The Cruiser sabe dónde residen mis lealtades.

¡Gracias por comentar, crack!

P.D. El mejor invento es presentar la hembra más espectacular de la saga en la cuarta película. Amazing.

Jimmy Dix dijo...

Lo que digo es que, cuando empiezo a ver misiles volando por el espacio y villanos de este tipo, yo empiezo a mirar el reloj.

¡¡¡Pero ¿¿¿no quedamos en que a ti te gustaban las películas de Bond???!!!


Veo que la tercera es tu preferida de la franquicia. Para mí, la primera es la mejor. De Palma es, con diferencia, el mejor director de los cuatro (estamos hablando de un tío que ha dirigido las muy hitchcocknianas Vestida para matar, Impacto y Doble cuerpo, la sublime Scarface, la impecable Los intocables y la excelente Carlito's Way). Su mano maestra se notó sin duda en la primera película (muy injustamente valorada), al igual que las de David Koepp, Robert Towne y Steven Zaillian, tres de los mejores guionistas del cine reciente. El prólogo de MI, en Praga, es maravilloso, con una deslumbrante puesta en escena (de nuevo muy hitchcockniana) y una ejecución magistral que ya quisiera tener el J.J. Abrams en sus mejores sueños. La famosa escena del robo de los archivos del ordenador con Cruise colgando del cable es maravillosa. Eso sí que es tensión y suspense en estado puro.

MI2 sí que es una caca. Una caca muy grande, con mucha pirotecnia y mucha tontería. Y mira que yo admiro al John Woo no hollywoodiense (Una bala en la cabeza y Hard Boiled son deliciosas), pero fue pisar suelo americano y el hombre abrió una churrería…

MI3 tengo que volver a verla (únicamente la he visto en el cine, una vez). Aunque solo sea por Felicity.

Paula Patton es una diosa.

¡Saludos!

Clark Kent dijo...

Jimmy, cómo disfruto cuando hablas de cine. Ay que pena de blog perdido entre ambos! Tú pondrías el conocimiento, yo el chichinabo. O, directamente, podrías hacerte un blog de cine. Colgar un post cada mes. Pues vaya cine, you know...

Respecto a los misiles volando, SÍ, amo James Bond. Pero hay que diferenciar, M:I siempre ha sido una locura "más contenida", con villanos pelín más terrenales, robando listas nocks y demás, no modificando posiciones de satélites y lanzando misiles... (ojito que viene una nueva comparación de las mías): Es como si en una nueva Parque Jurásico sale Superman volando y tumba a un T-Rex de un puñetazo. ¿No me gusta la sci-fi? Oh, yeah. Pero cada cosa en su momento.

Yo en cine, salí decepcionado de M:I:III. Te ruego una segunda visión en casa. Estoy dispuesto a pagarte, jaja!

Y M:I nunca ha sido lo suficientemente valorada: Cruise colgando del cable y la gota de sudor sigue siendo LA SET-PIECE más grande de toda la saga. Y el inicio es MEMORABLE (en El Protocolo intentan hacer algo "similar" con el hotel loco de las habitaciones cambiantes pero como que no...).

Respecto a M:I:II, oh, man... yo amo una paloma voladora en slow-mo como cualquier hijo de vecino, pero la verdad es que es un poco insoportable. El film entero no se puede tolerar. Ciertas secuencias, sí.

¿Alguna opinión sobre "Knight & Day"? Una parodia absolutamente consciente por parte de Cruise de su papel de Ethan Hunt. Es una película a recuperar.

Jimmy Dix dijo...

Jejeje, la verdad es que estaría bien lo del blog de cine compartido. Y estoy seguro de que se hará. Un proyecto mano con mano con el inmenso Clark Kent requiere una gran dedicación para estar a su altura. Y yo ahora mismo no dispongo del tiempo suficiente (ni siquiera escribo ya en Pues vaya mundo y he abandonado Pues vaya tele y casi —solo casi— Twitter). Pero yo creo que ese blog nacerá antes o después. Debe nacer. Tiene que nacer. Y ¿qué es eso de que yo pondría el conocimiento y tú el chichinabo? Admiradísimo Clark, más bien sería justo al contrario.

Y volviendo al tema que nos ocupa, pues sí: de nuevo tu comparación me ha dejado fuera de juego y protestándole al árbitro. "Cada cosa en su momento". Touché de esos, jajajaja.

MI3 no la recuerdo demasiado bien. Sé que me gustó, eso sí. Y creo que J. J. Abrams tiene que darnos muchas alegrías. Nunca será Spielberg ni Zemeckis (para mí, los dos mejores narradores del cine actual y a los que él tanto se quiere parecer: solo hay que ver Super 8), pero estoy de acuerdo contigo en que el tío sabe cómo contar una historia y, sin duda alguna, sabe sobre todo venderla, que es casi más importante. Así que tengo que volver a ver la tercera parte. ¿Estás dispuesto a pagarme? En principio lo iba a hacer gratis, pero todo se puede hablar, ¿no?, jajaja.

La primera parte la he visto unas cuantas veces. Siempre la he disfrutado. De Palma es muy grande, pero es el director más irregular que existe en Hollywood.

Estamos de acuerdo con lo de MI2. Una película americana entera de Woo es indigesta. Si son bocados sueltos, perfecto, pero el pavo relleno completo… como que no. Eso sí, te recomiendo que veas de él dos maravillas que hizo en Hong Kong poco antes de ser fichado en Hollywood: Una bala en la cabeza y Hard Boiled. Grandiosas, excesivas, gloriosas. Imagino que podrás encontrarlas por Internet. Yo las vi hace años, a mediados de los noventa ¡¡¡alquiladas en VHS!!! Ay, el VHS... Somos la generación (yo nací en el 75) que lo vio nacer y morir. Ay, qué tiempos. En casa de mi madre tengo una colección de unas 500 películas en VHS, la inmensa mayoría grabadas directamente de la tele: pensar que todo lo que antes necesitaba de varias estanterías cabe ahora en un solo disco duro que casi cabe en la palma de una mano… Que digo yo que, ya que ha vuelto el vinilo, ¿por qué no vuelve el VHS? O, mejor aún, ¡¡¡el BETA!!! Jajajaja. ¡Yo me apunto desde ya!

Noche y día. No sé yo si quiero recuperarla. Me pareció entretenida… pero poco más. Recuerdo que el final no me gustó nada de nada (y lo de los toros de los sanfermines por las calles ¡¡¡de Sevilla!!! no tiene nombre…). Y sí, yo también pensé en lo autoparódico del personaje. Yo creo que Cruise se equivocó al elegir al director. Y al guionista, por supuesto (era su primer guión y quién sabe si también el último, jajaja). Eso sí, qué bien corría Tom también en esa película, jajajaja.

Oye, Clark, ya sé que no tiene que ver nada con esto, pero ¿¿¿estás viendo la nueva serie de Ricky Gervais, Life's Too Short??? Si no lo has visto aún, ¡¡¡ya estás tardando!!!

¡Saludos!