Las charlas, más breves de lo que me hubiese gustado, con los dueños y/o responsables de The Comic Co., Ordning & Reda, Altäir, Juguetrónica, Éxtasis o In Bicycle We Trust para DolceCity Madrid aumentaron mi deseo por tocar el género de la entrevista con la misma pasión con la que le tocaría un pecho a Scarlett Johansson. Quiero entrevistar a la gente hasta la orden de alejamiento. Entrevistaré a dueños de tiendas, payasos de fiestas infantiles, el portero de mi piso y a los empleados de Rodilla.
El único criterio o requisito para entrevistar a alguien es que esa persona, por lo que sea, me fascine. Espero que a vosotros (dos) os entretengan estas interviús tanto como la de Alaska. Algunas serán más profundas, otras más tontas, y la mayoría serán superficiales y algo tópicas; pero iré mejorando con el tiempo, como los buenos
vinos
whoppers. El blog mantendrá su título, porque es periodísticamente tan apropiado para las entrevistas como para el análisis de revistas que ya he hecho y pienso seguir haciendo.
Una pequeña historia antes de la primera entrevista de Contra y Portada: Las preguntas y respuestas que vienen a continuación fueron enviadas por e-mail a finales de mayo del año pasado. Puede que no reflejen la opinión actual de Vicente García, el fundador y editor de Dolmen (la mejor revista de información sobre cómics de España); pero no creo que haya cambiado sustancialmente desde entonces. Quiero desde aquí disculparme con él por publicar ahora, ocho meses después, la entrevista que le prometí iba a publicar "la semana que viene". A modo de disculpa, tiene el (dudoso) honor de ser la primera entrevista del blog. Gracias de nuevo, Vicente.
CyP: - Tengo entendido que Dolmen nació como un fanzine, ¿cómo y por qué se produce la transición a revista? ¿Fueron difíciles los pasos para editar y distribuir una revista en toda España?
Vicente: - Se hizo de firma natural, casi sin darnos cuenta. De hecho, no hay un momento en que dijéramos "ahora es una revista". La gente comenzó a llamarlo revista y una vez llegó el color (originalmente se publicaba en blanco y negro), la cosa ya fue inevitable. Imagino que el paso fundamental fue el de la imprenta. Fue todo poco a poco, por lo que la transición no se hizo dura, fue un periodo de aprendizaje continuo.
- ¿Te pilló de nuevas todo esto de dirigir una revista mensual o ya tenías alguna experiencia previa?
- Aprendí con el Dolmen. Antes salía cada 2-3 meses (hasta el nº 10 que cogió la inercia mensual actual). Ha sido complicado, puesto que siempre hay cosas que desconoces y tienes que informarte, aunque ahora con el gran equipo que hay en torno a la revista no tengo ni de lejos la sensación de soledad que pueda recordar de los primeros números. Internet ha ayudado mucho y la revista ya se hace sola gracias a la gente que la hace.
- ¿Qué es lo mejor y lo peor de hacer la revista cada mes?
- Lo mejor es ver a la gente que la hace, y que hace que sea una cosa casi automática. Lo peor, el no poder hacerlo casi todo como antes, la editorial ha crecido y ahora hay mil cosas que hacer, principalmente coordinar a la gente.
- ¿Te gusta el proceso de hacer la revista cada mes, o lo que de verdad disfrutas es hablar sobre cómics? Es decir, ¿la revista Dolmen es un trámite para hablar de tu pasión o se ha convertido en una pasión en sí misma? (Vaya con la preguntita...)
- Me gusta mucho hacer la revista, aunque eso crea ese alejamiento que hace que en ocasiones me pierda partes del proceso que me encantaban; y el hecho de hacer de tu pasión tu trabajo hace que pierda cierto glamour, es como mirar una película viendo los focos, las cámaras, etc.
- Me da la sensación de que cada mes sacrificáis un montón de contenidos por falta de espacio, ¿qué sección o reportaje se ha caído más veces por esta falta de espacio? ¿Hay alguna sección que no haya podido ni siquiera debutar en la revista por este motivo?
- Sí, cada número podría tener el doble de contenidos, de hecho, el diseñador me odia ya que ha de comprimir los textos teniendo que sacrificar la estética. Y más que secciones que no hayan aparecido (que algo ha habido), hay secciones que han tenido que dejar de hacerse por petición popular, ya que algo que hemos hecho desde el principio es escuchar a la gente que nos lee.
- ¿Cómo es la redacción de Dolmen? ¿Hay reunión conjunta para decidir los temas de cada mes? ¿Cómo se le asigna cada uno a un autor? ¿Se trabaja desde casa o siempre en oficina?
- Ahora mismo, con el director en Asturias, las reuniones son vía mail. Planteamos temas y contenidos y luego la gente que participa, con Germán ahora a la cabeza, decide. Ahí Jaume y Koldo juegan un papel fundamental.
- Respecto al diseño de la revista, ¿habéis pensado alguna vez en cambiarlo, en hacerle un lavado de cara total a la revista? ¿O estáis contentos tal cual está actualmente? Apenas ha cambiado desde que yo la sigo, hace ya más de tres años.
- Ya lo cambiamos una vez y fue traumático el ver el cambio, y eso que fue a mejor. No podemos hacer mucho si no queremos dejar más información fuera. Hemos publicado muchos libros que han tenido mucho menos texto que un Dolmen normal, y ya no digamos que alguno de los especiales...
- La revista Wizard ha dejado de editarse en papel y ya hablásteis sobre ello en Dolmen. ¿Por qué creéis que el lector de cómics americano no estaba interesado en ella? Y ¿por qué el lector español sí lo está en Dolmen?
- Era una revista con contenidos muy distintos y con una finalidad diferente. Una vez perdió la base de ser una guía de precios y siguió sin ofrecer información "sesuda", la gente debió de perder interés. Dolmen intenta ofrecer trabajos de investigación junto a noticias de actualidad.
- ¿Cómo pasáis de ser revista a convertiros en toda una editorial?
- De nuevo, es algo natural. Ocurrió poco a poco y gracias a las ganas y la pasión hacia este medio. Conocíamos a muchos dibujantes y nos pareció lógico intentarlo.
- En el II Día del cómic gratuito, sólo dos tiendas de cómics de Madrid capital (Enigma y El Mono Araña) participaron en el evento y muy poca gente se enteró del tema. ¿Qué te parece esto? ¿Qué harías tú particularmente o vosotros desde Dolmen para darle mayor difusión a un acontecimiento de este tipo y al mundo del cómic en general?
- Sucede como siempre, ideas geniales que el día a día acaba matando por no hacerles el seguimiento adecuado. A nosotros nos pasa cada día, por lo que poco podemos hacer al respecto. Somos pocos para mucho trabajo, ya sea en el ámbito de las librerías, editorial, etc. Espero que poco a poco la cosa mejore y podamos vivir todos un poco más relajados.
- ¿Cómo nació la coña de cambiar cada mes las líneas dedicados a los jueces sobre las opiniones de los autores de la revista? (Leer análisis de Dolmen para mayor información) ¿Algún día os quedaréis sin ideas para tan mítico espacio?
- Pues surgió intentando buscar una broma con los lectores más avispados. No fue una cosa que se decidiera ex profeso. El texto debía de revisarse cada mes para cambiar el número, el mes, los colaboradores… de modo que me pareció lógico cambiar también eso. Nunca pensé en que hubiera mucha gente que se fijara en ello.
- Esto ya es una debilidad personal, ¿qué te pareció el "Superman Earth One" y cómo crees que resultará el reboot de Superman de Zack Snyder?
- A mí me gustó, y le tengo muchas ganas a la nueva película, ya que todo apunta a que será realmente espectacular... y el personaje tiene ya algunos mimbres.
- ¿Estás contento con como han recibido los lectores tu novela "Apocalipsis Island"? ¿Leeremos más novelas tuyas en un futuro próximo?
- Estoy muy contento, y no me esperaba agotarla en la vida. Y ya ves, varias ediciones. Imagino que se debe más a tener muchos amigos y al morbo de ver al editor escribiendo... Y también imagino que no debe estar tan mal, porque las críticas han sido buenas y se sigue vendiendo a un gran ritmo.
- La última es la que más intrigado me tiene... ¿¿por qué la revista se llama DOLMEN??
- Inicialmente porque era un fanzine mallorquín (nunca nos imaginamos dar el salto, que tardó sólo un número en llegar), y Dolmen era el personaje mallorquín del grupo Iberia Inc, así que nos apreció lógico el nombre. Hubo varias opciones que debería rebuscar en los apuntes que tengo de aquella época, pero al final se impuso Dolmen. Y, mira por donde, ahora es una editorial.
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