31 de agosto de 2010

Domingos de radio

Llevo escuchando el Carrusel Deportivo toda mi vida. El otro día, al escuchar a Paquito y Pepe Domingo en la COPE (como pienso hacer desde ahora), me puse a pensar y... guau... llevo unos 20 años de mi vida escuchando a esta gente todos los fines de semana. No voy a decir eso de "se han convertido en unos amigos", pero sólo para evitar el escupitinajo. Si aquí no se fuera a derramar saliva, lo diría. Son unos auténticos cracks y me hacen la vida un poquito más divertida.

El otro día en el curro, ese curro que me succiona la vida como un vampirillo a una muchacha en la oscuridad de la noche, me puse a escuchar los primeros e históricos segundos de Paco, Pepe y compañía en la COPE. Y, maldita sea, hasta me emocioné. Si hubiera llorado, que no lo hice, hubiese parafraseado a mis nuevos ídolos televisivos, Bret y Jemaine de "Flight of the conchords": "No es que haya llorado, es que me ha estado lloviendo en la cara".

No lloré, decía, pero lo que escuché me tocó la patata. Sí, ya sé que esa gente no tiene absolutamente nada que ver conmigo y que sólo es un programa de deportes, pero hay gente que se emociona con perros anunciando papel higiénico, así que aquí hay libertad de prensa y de emocionamientos. Y es importante dejar claro que hay empresas que venden una ideología en las ondas y en los kioscos cuando practican exactamente la contraria dentro de su casa. Qué bien hilado, ¿eh? En fin, asuntos que me quedan muy grandes y muy lejos. Pero el Carrusel, mi Carrusel (el "Tiempo de juego", perdón) siempre me quedará cerca.

Seais o no fans del furgol y de la radio, os recomiendo que lo escuchéis.

2 comentarios:

marijose dijo...

Te entiendo perfectamente.

Yo tb estuve haciendo memoria y llevo escuchando Carrusel mínimo 10 años. Y no es que me guste el fútbol, pero me partía de risa con la primera hora (se les iba la pinza pero bien) y tengo la costumbre de tener la radio puesta como ruido de fondo.

Al ponerme a escuchar el nuevo Carrusel, me sentí extrañísima, como si me faltara algo (y, para qué negarlo, es un coñazo). Aún me resisto a cambiarme a la COPE (soy un animal de costumbres y llevo toda la vida escuchando la Ser) pero reconozco que han conseguido que les eche muuuuucho de menos.

Clark Kent dijo...

Es una costumbre facilísima de cambiar. Yo la COPE no la tocaba ni con un palo, que diría un amigo mío, pero ahora es "donde nos gusta estar". El nuevo Carrusel, que se llama TIEMPO DE JUEGO, es lo de siempre, pero con más ganas. Son los cracks. El nuevo viejo Carrusel, o sea, el de la Ser, es un coñazo de muchísimo cuidado.

Y repito, ciertas empresas venden una ideología... pero sólo para llenarse los bolsillos, porque de puertas para adentro practican la contraria. Eso es, como diría un ex de Gran Hermano: "FARZERÍO".