15 de marzo de 2011

Dejamos el portátil, Mayra, nos quedamos con el periódico


¿Os acordáis de el "Un dos tres"? Ah, mítico. Yo recuerdo mucho la etapa de Mayra Gómez Kemp y la siguiente a esa, la de Jordi Estadella y Miriam Díaz Aroca. Luego vino una con un señor mayor catalán y con bigotillo que no acabó de funcionar para nadie y la llamaron "Un dos tres a leer esta vez" (lo recuerdo porque aún guardo un ejemplar de "Las mil y una noches" -que no he leído aún, por supuesto- que promocionaron en los kioskos con motivo del regreso del concurso a la tele).

Bueno, que no quería aquí hablar del concurso en sí, sólo quería valerme del sistemilla aquel de "dejamos una cosa de las que nos ofreces y nos quedamos con esa otra que dejó Bigote Arrocet en la mesa" para explicar lo que me ha pasado a mí hace poco. Concretamente ayer. No es que me haya pasado nada, es que llegué a una conclusión que me dejó muy tranquilo. Como cuando noto que mis ensaladas están sosas y empiezo a regarlas con pasas para endulzarlas. Sí, sí, el chico ha dicho pasas. ¡Probadlo! ¡Mano de santo esas pasas revoltosas! ¡Pasas santas! ¡Pasantas!

"Déjate de pasas, maldito enfermo, ¿a qué conclusión llegaste ayer?" Pues a la siguiente: he perdido un portátil pero he ganado un periódico. Currando en "No somos nadie", con aquel horario loco e imposible, era complicado para mí leer un periódico a diario. Me refiero a LEER UN PERIÓDICO, es decir, pasar de la sección de deportes. El programa duró dos años. Luego estuve fuera con Loida año y medio... Pongamos que llevaba casi cuatro años sin leer la prensa de forma regular (el As no cuenta). Sí, me daban mis rachas de una semana leyendo a tope o medio mes dedicado a la labor... pero siempre acababa perdiendo la costumbre. Esto no es como ir al váter, el apretón que te entra no es tan fuerte. Digamos que para leer un periódico cada día tienes que ponerle mucho interés. Es como un capítulo de CSI, si no pones mucho de tu parte, eso no peta.

Pues bien, gracias a la promoción esa del netbook que regalaba El País recortando los cupones de una cartilla he ganado un periódico. Uno que me compro todos los días y que intento leer enterito siempre que puedo (es una labor compleja ésta incluso para un parado). Mi pretensión de recortar los tropecientosmil cupones para conseguir un netbook relativamente barato fue dejando paso a mi deseo de leer el periódico en primer lugar... y luego ya me preocuparía el último día de recortar todos los cuponcitos para pegarlos en la cartilla (cartilla que tuvo que pasarme @polkium vía internet con suma amabilidad).

"De acuerdo, chico, empezaste a salir con él por sus cupones pero te acabaste enamorando de su corazón, perfecto, ¿pero tienes algo más que aportar antes de que cierre esta ventana y vuelva a consultar mi Gmail?" Pues sí, mira. Que ayer, tras recortar y pegar todos los cupones que me faltaban por recortar y pegar, me di cuenta de que a mi cartilla le faltaban 5 cupones. Y ya no podía colocar los cupones comodín PORQUE EL PAÍS HA PARADO DE PUBLICAR CUPONES DEL NETBOOK Y HA EMPEZADO A PUBLICAR DE LAS TAZAS DE STAR WARS. No han dado ni una semana de colchón de cupones comodín para los que llevábamos dos meses y medio dale que te pego con las tijeras y el pegamento imedio. Cabroncetes...

Bah, no me dolió demasiado. Me alegro de ahorrarme los 123 euros que costaba el netbook porque ahora, realmente, no lo necesito (cruzo los dedos para que mi portátil siga resistiendo como una roca). Además, ¡esas tazas de Darth Vader son la leche! Y lo que decía al principio, que me he ganado un periódico... aunque ya podría costar un eurito en lugar del 1´20.

1 comentario:

Jimmy Dix dijo...

Antes de nada, Clark, esta vez has acertado de pleno con el diseño del blog (¡el anterior, con ese amarillo chillón cegador, era insufrible!). Please, no lo cambies más… al menos durante lo que queda de mes, je, je. (Me encanta eso de "Cambiando de diseño desde julio de 2010", ja, ja, ja).

El netbook del que hablas, ¿no es el que cuesta 69 €? Yo no compro El País, pero mis suegros sí, y ahí llevan recortando cupones unos meses, y luego se lo compraré por los 69 € que anunciaban en la promoción. Es más, creo que precisamente esta semana es cuando están publicando los cinco cupones comodines de los que hablas… Pero no me eches demasiada cuenta, que ya te digo que yo no lo compro. Me informaré del tema y te diré algo.

Sobre lo de El País, a mí también me gustaría comprarlo, pero es que también querría comprar Público y El Mundo (que también hay que leer las cosas de los ultras). Y como no es plan de gastarse cada día una pasta, al final prefiero leer la prensa por Internet. No es lo mismo, sí, pero es gratis. Y, oye, la palabra gratis como que suena bien. Es como si ahora tuviera que volver a pagar por ir al videoclub a alquilar o a pasarme por la FNAC para comprar películas o series de la tele. Como que no, que todos los días saco a pastar a mi mulita preciosa, a la que tanto quiero y cuido y le doy las mejores hierbas de la pradera. Así que cada día, me leo (no enteros, claro) varios periódicos por Internet (y eso incluye ABC y La Razón, que ya hay que tener estómago, oiga) y me quedo tan feliz (eso sí, yo no leo prensa deportiva por aquello de las alergias; me conformo con la sección de deportes de los demás periódicos). Y, si eso, para seguir informado, además de los Telediarios de TVE (y, a veces, esos de humor de La Sexta), cada noche de lunes a viernes me trago enterita la primera hora de La Noche en 24 horas con el gran (aunque a veces cansino) Vicente Vallés, y luego, a partir de las 23:30 h y hasta que Morfeo me viola, disfruto con Al rojo vivo en La Sexta 2, que me gusta especialmente gracias a las peleas que se montan entre supuestos progres y fachones cada noche (en realidad, piensan casi lo mismo, porque unos defienden al PSOE y otros al PP, o sea: lo mismo al 99,5%). Lo mejor del programa son las entrevistas que hacen al invitado de turno (ayer y anteayer, por ejemplo, estuvieron hablando con expertos en asuntos de energía nuclear, y estuvieron interesantísimos). En fin, que entre periódicos cibernéticos, telediarios y debates varios, estoy al día sin tener que gastarme ni un duro (miento, porque Internet vale una pasta en este país dejado de la mano de Dios llamado Ejpaña).

Y corto, que va a parecer que el blog es mío, Clark. Y mi nivel no llega tan alto, crack.

¡Saludos!