12 de abril de 2011

Doce hombres sin piedad

Qué peliculón. Qué actorazos. Qué todo. Hace meses, en Dublín, ya me la recomendó un ex-compañero de trabajo, pero no ha sido hasta hoy que la he visto. Tras la muerte de Sidney Lumet, la biblioteca de mi barrio (y la de todos los barrios, I guess) montó una "restrospectiva" sobre el bueno de Sid (una retrospectiva en una biblioteca pública es dedicarle una estantería entera a un señor, ya sea el escritor recientemente galordonado con el Premio Planeta o el director de cine recientemente finado, como es el caso). Y, claro, cuando te ponen "la cultura" (así, a lo grande) tan a mano y tan gratis (y sin ninguna alternativa de Michael Bay disponible) pues no te queda otra que decir: "Venga, me llevo una de Sidney Lumet, a ver si todas esas buenas palabras que le han dedicado eran ciertas".



No sé si todas, pero seguro que muchas. "12 hombres sin piedad" ("12 Angry Men" - que podrían haber titulado "12 tíos enfurruñaos" si nos ponemos literales) es un peliculón absoluto. Hay peliculones parciales ("Bowfinger", "La Isla", "Con Air") y hay peliculones absolutos. Éste es absoluto. Básicamente es hora y media de 12 señores sentados discutiendo. Y es la repanocha. La verdad es que la película lo tenía todo para gustarme:

- Tema juicios. Me mola.
- Tema intercambio de opiniones, argumentaciones contrarias, cambios de punto de vista... Me encanta. Es por ello que "59 segundos" (cuando lo presentaba Mamen Mendizábal, no ahora que se ha vuelto más soso) o "Al rojo vivo" me parecen los mejores programas de la televisión.
- Tema casi todo rodado en un infinito plano secuencia. No es así, ni el film tampoco pretende dar la sensación de "mira qué guays que somos que hemos disimulado los cortes y parece que lo hemos rodado todo del tirón". No, la peli no intenta eso. Pero sí que se desarrolla todo prácticamente en un único escenario y apenas hay cortes y saltos de tiempo. Es todo del tirón. No tan a saco como "La soga", pero casi.


Con todos esos ingredientes, I was game from the beginning. Además, estaba el morbillo de ver una peli de este director que dicen ha sido tan importante. Me ha encantado así que pienso seguir viendo más del tío. Hasta esa que rodó hace unos años con Vin Diesel. Porque, con peluquín o sin él, Vin Diesel me parece un tío con un carisma hiper-brutal que lo tiene todo para protagonizar una película. Al menos, eso me pareció tras verle por primera y última vez en cine en "The Fast And The Furious" dando vida a Nosequé Toretto. Creo que el personaje se apellidaba Toretto. Me encanta "Toretto".

Lo repetiré: ¿Vin Diesel? Carismazo. Acting Skills? Don´t know, don´t care.

Pues eso, que Sidney Lumet tiene mis respetos desde hoy, que me ha proporcionado una sesión cinematográfica nocturna más que entretenida. Un exitazo, Sidney. La película (venga, os voy a contar algo de ella en el vigesimoquinto párrafo, que ya toca) va de un señor que intenta convencer a los otros 11 miembros del jurado de que el chaval que está siendo juzgado no es culpable del crimen del que se le acusa. Este señor es una especie de ángel alado (pero sin alas) al que da vida Henry Fonda. Otro crack el Henry. Tiene unos ojazos y un porte de héroe americano de los de antes, a lo James Stewart, que asusta. No os diré si el tío convence a uno, a dos, a siete o a ninguno. Pero sí que os diré que es apasionante verle intentando remontar el partido.


Lo más grande de "12 hombres sin piedad" es cómo te convierten hora y media de soliloquios en puro arte cinematográfico, vibrante y chisposo. Vale, aquello no es "Speed", pero el Tito Sid se las arregla para rodarlo y editarlo manteniendo siempre el interés. Ahora cambio el ángulo, ahora meto un poquito de jaleo, ahora hago que el tío argumente directamente a cámara... Hay un montón de momentos de estos, al menos tres, en los que los personajes que están razonando lo hacen directamente al espectador, convirtiéndote también a ti en jurado del caso. Salvo por el hecho de que aquello es una ficción de 1957.

Bravo por las pelis donde se pasan hora y media hablando. Tenéis más información de la peli aquí y aquí. Y no son enlaces que pongo por poner, si queréis vivir la experiencia "Angry Men" completa, tenéis que pinchar.

Y mucho ojo a este hallazgo: en la imprescindible web de TVE han colgado una adaptación que hicieron en los 70 con actores españoles en "Estudio 1". Oh, my. Voy a verla sólo por la curiosidad y para comparar (curiosamente, "12 hombres sin piedad" nació en 1954 como una obra televisiva de Reginal Rose para el programa "Studio One" de la CBS).

He recopilado los mejores pósters de la película (y alguna que otra sorpresa) en este post de Contra y Portada, el blog donde me ocupo de estos asuntillos.

Os dejo con el trailer. Uno de aquellos de antaño, you know.

6 comentarios:

Javi dijo...

Vaya, sé de uno que hace no mucho se quejaba de una película en la que sus estupendos actores no hacían más que hablar. La película: "La duda". Claro, no era una de juicios, pero diálogos tenía para llenar un suplemento dominical...

"Doce hombres sin piedad" es un peliculón. Recuerdo haberla visto en el programa de cine de Garci. Sobre todo recuerdo el desasosiego que te produce el saber que la justicia se apoya en los hombros tan frágiles de los seres humanos.

Clark Kent dijo...

Jaja! Es verdad. Soy inconsistente en mis críticas.

Creo que, a diferencia de La Duda, aquí PASAN cosas. En La Duda es un marear la perdiz hasta el día del juicio final, aquí la acción avanza. No sé, tengo que revisar La Duda aunque sea por volver a ver a Amy Adams, la que será nueva Lois Lane.

¡Gracias por comentar, Javi!

David Ibáñez -Fox- Vamos a contarlo en Tiras. dijo...

Peliculón.

AccentLess dijo...

Para grandes, infinitos y APROVECHABLES dialogos, me quedo con los "culo-boca" y otras perlas de Kevin Smith.

Jimmy Dix dijo...

Doce hombres sin piedad es una obra maestra. ¡Y pensar que es una opera prima! Claro que, antes de dirigir cine, Lumet ya llevaba unos cuantos años haciendo televisión. El hombre sabía lo que se hacía.

Lumet es uno de los grandes. Clásico, elegante, efectivo. Un cineasta de los pies a la cabeza. De entre sus muchas buenas películas, te recomiendo que veas, entre otras, Serpico, Tarde de perros, Network, Veredicto final o Asesinato en el Orient Express. Quizás no sean tan buenas como Doce hombres sin piedad, pero son una muestra de buen cine, del que apenas se ve ya hoy en día (Scorsese, uno de los más grandes, tiene a Lumet en los altares). Las podrás encontrar sin demasiadas dificultades en la Mula, en torrents, o en algún videoclub de Madrid que tenga un buen fondo de catálogo en VHS (desconozco si están editadas en DVD, aunque me imagino que sí). Ya puestos, busca en la biblioteca de tu barrio, quién sabe…

Te recomiendo también su última película, de hace unos pocos años, la espléndida Antes que el diablo sepa que has muerto. Una lección de cine de la mano de un hombre de ochenta y tantos años.

Gran post. Si no hubiera visto ya la película, hubiera corrido a verla tras leer esta entrada.

¡Saludos!

Clark Kent dijo...

Joder, Jimmy, peazo comentario. Bastante mejor que el post.

¿¿Esta era la primera peli de Lumet?? Mamma mía!!! Serpico la he visto y me encanta, peliculón. Tarde de perros me gustó tb, pero no he visto el resto. Me las apunto (o sea, las voy descargando).

Y Scorsese es LO PUTO CRACK, que llamaban a De la Peña cuando jugaba en el Barça. LO PUTO CRACK.